El artículo de opinión de hoy es una pequeña y efímera crítica al blog de fútbol "Libredirecto". Un blog dedicado al fútbol de la provincia de Ourense. El blog libredirecto, según reza en su portada, está gestionado por un señor llamado Laureano Nieto. En libredirecto, un buen amigo escribía un artículo de opinión sobre los entrenadores Pep Guardiola y José Mouriño, en el mismo, él dice ensalzar las bondades de ambos entrenadores, sin embargo, desde mi percepción, es muy negativista con Mouriño, yo considero a Mouriño mucho más inteligente y conocedor del mercado en el que trabaja, su homólogo catalanista mezcla la política con el fútbol, un hecho despreciable y que constituye el mayor fracaso colectivo del fútbol español.
Voy a reproducir el artículo de Yelco Domínguez con permiso de su autor:
La diferencia de entender el fútbol entre Pep Guardiola y José Mourinho es abismal, mientras uno intenta construir, el otro busca la forma de destruir, ambos métodos respetables y no siempre eficaces, aunque no se puede negar su fidelidad a una identidad y mucho menos criticarla. Con el concepto de eficacia se llegarían a plantear ciertos matices como si de verdad es necesaria la eficiencia y la estética (excelencia futbolística), pero sin profundizar en este aspecto decir que los dos entrenadores son trabajadores, ganadores y a la postre los mejores del mundo.
Sin entrar en el humanismo y valores de cada uno centrémonos en el legado y recuerdo que tienen de ellos sus anteriores clubes. Mientras Pep es añorado y recordado por la “culerada”, Mou plantea varias discrepancias en su antigua afición, por un lado el más radicalismo-madridismo echa de menos al que fue su gurú, para éstos el “Special one” ha luchado y ha plantado cara a la hegemonía del mejor Barça de la historia, en cambio para el señorío del Bernabéu el portugués ha sido una bomba de relojería, creando grupos y dividiendo el vestuario blanco. Sus detractores entienden que el entrenador del Real Madrid debe ser un hombre tranquilo, pacificador, que se maneje en las ruedas de prensa como Marc Márquez lo hace en un circuito de motos, pero ante todo que tenga una manguera apaga-incendios para calmar al siempre difícil entorno de un club tan grande. Esta gente (la mayoría) se alegra de que le vaya mal a José Mourinho. Un sector del madridismo celebra en silencio sus fallos “deportivos” mientras que sus adeptos sufren sus fracasos.
Con Josep Guardiola ocurre todo lo contrario, un barcelonismo siempre con divergencias internas y dividido por el dichoso “entorno” hace piña para apoyar a su héroe iluminado, nuñistas, cruyffistas, laportistas y rosellistas unifican la misma idea (como bien dice “El Cant del Barça”; “tots units fem força”) y defienden a capa y espada todo lo que haga El Noi de Santpedor en sus futuros equipos. El éxito de Pep es el de todos los culés. Pep es “uno de los nuestros” y nunca le hará daño al club del que forma parte como socio y en el cual tiene su hogar para siempre.
Estamos ante dos genios sin duda alguna, capaces de jugar con los sentimientos de mucha gente, a priori parecen muy distintos pero en realidad no lo son tanto. La hipocresía, el odio y el temor son conceptos que en la vida misma sonarían peligrosos e inquietantes pero que en el mundo del fútbol son mera pasión. Serán los imparciales los que valoren objetivamente sus cualidades, pero todos, absolutamente todos reconocerán que han marcado historia. Pep y Mou, Mou y Pep dos formas de entender el fútbol y la vida.
Yelco Manuel Domínguez Varela YC (@yelco_ou)
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